Las Últimas Noticias, 22 de agosto de 2016
Mario Córdova
 
Konzert, Santiago de Chile, Moviestar Arena, 18. August 2016
 
Jonas Kaufmann al cierre

İQuén lo iba a imaginar! El que hace rato es considerado el mejor tenor del mundo y primera figura de la ópera mundial -el mismísimo Jonas Kaufmannya pasó por Santiago, dando un gran recital ante cinco mil personas en el Movistar Arena.
Fue una presentación magnífica. Sin embargo, sobre ella abundaron las dudas previas sobre su efectiva concreción, las quejas por las costosas entradas (finalmente rebajadas) e incluso la inconformidad de tener a este artistazo sólo en ese recinto poco afin al canto operístico y con sonido amplificado. Desde que se conoció el programa del recital y sobre todo al término de éste se hicieron escuchar, además, críticas sobre una excesiva mezquindad, por incluir nada más que siete arias, en alternancia con piezas orquestales.

El respetable público que asistió y todo aquél que no lo hizo podrán seguir sumando peros a este tremendo concierto, sin apreciar ni disfrutar cuán lleno (por no decir rebasado) estuvo un vaso gigante que habrá que atesorar como histórico.

Se tuvo a Jonas Kaufmann en el peak de su exitosa carrera, acompañado de una grande, nueva y muy buena orquesta local (la Filarmónica de Chile) en una jornada totalmente dedicada a la ópera, por cierto aplastando a las que brindó en otros escenarios latinoamericanos de su gira, donde no hubo ni ópera ni orquesta.

El despliegue interpretativo fue excelente y poderoso, sólo menguado en momentos puntuales ("Aria de la Flor" y "Celeste Aida"), donde afloraron esos curiosos y acaso prefabricados pianíssimos que tanto se cuestionan a Kaufmann. En el resto todo fue de excelencia pura e impactante, que la rompió, llegando a elevadísimas cumbres, como lo fueron las arias de "Cavallería Rusticana", "Andrea Chenier" y "El Cid", que el tenor coronó con una arrasadora "Nessun dorma" de "Turandot".

Los que aludieron a esa mezquindad, no consideran ni que las siete contundentes arias dispuestas eran suficiente carga pesada el recital de un tenor como Kaufmann, ni que habría agregados finales, que fueron cuatro.

Quienes despreciaban la necesaria amplificación o la rechazaron de plano no asistiendo -parecen no recordar los recitales de Pavarotti, Domingo y Carreras en estadios abiertos -, recibieron un fuerte tapabocas con el espléndido trabajo realizado por Loretta Nass, ingeniero de sonido chilena muy experimentada, que aquí se lució como nunca.

Esta memorable actuación de Jonas Kaufmann debe agradecerse a sus visionarios y esforzados organizadores, a quienes es válido sugerir ya el nombre para una nueva y pronta contratación operística top one: la soprano Anna Netrebko.






 






 
 
  www.jkaufmann.info/td> back top