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Ritmo, September 2020 |
por Gonzalo Pérez Chamorro |
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Jonas Kaufmann - Selige Stunde, el lado íntimo del tenor
Al hilo telefónico la voz de Jonas Kaufmann suena como la del
descanso del guerrero, aquel que atravesó parajes indómitos para descubrir
el Grial o el que se debate entre el amor y el deber de un grande de España.
Pero nos toca hablar ahora del lado más íntimo del tenor alemán, el que
corresponde a Selige Stunde (Romantic Songs) su última grabación para el
sello Sony Classical, junto al sensacional pianista Helmut Deutsch, en una
recopilación de Lieder románticos (en una audición privada, una amiga y
experta en Lied me comentó que este disco debería llevar este titular: “Herr
Kaufmann, más Lied y menos ópera”, porque “sigue siendo un estupendo
cantante de Lied, con gran expresividad, fraseo y dicción inmaculada. Y
Deutsch sigue siendo un crack…”). Tales planteamientos críticos me han hecho
escuchar con delicia un disco hermosísimo, donde Kaufmann canta Lieder de
Schubert, Beethoven, Silcher, Mendelssohn, Grieg, Liszt, Böhm, R. Strauss,
Zemlinsky, Chopin, Wolf, Dvorák, Brahms, Tchaikovsky, Mozart y, por último,
Mahler, con su emocionante “Ich bin der Welt abhanden gekommen” (“Me he
retirado del mundo”), como guiño a la situación especial de confinamiento
durante la cual se grabó gran parte del disco.
“Cada tres o cuatro
minutos tienes que abordar una situación diferente y asumir una personalidad
diferente en cada canción; así que estudias cada una de las canciones en
función de su argumento, el personaje que cuenta la historia y el mensaje
que quiere transmitir a la audiencia”, nos relata el tenor, esta vez el más
romántico de toda su ya amplia discografía para Sony Classical.
Tras su grabación del ciclo de Lieder Winterreise de Schubert, para
el que dotó de una unidad a cada Lied como parte del propio ciclo, ¿cómo se
predispone para otra grabación de Lieder, pero en este caso cada uno
independiente, sin conexiones entre ellos, aparte de la simultaneidad en los
textos poéticos?
El proceso de preparación es el mismo que
dedico para preparar un recital de Lieder en directo en el escenario: no se
cuenta una sola historia, como en el Winterreise, sino veinte o más
historias pequeñas. Cada tres o cuatro minutos tienes que abordar una
situación diferente y asumir una personalidad diferente. Así que estudias
cada una de las canciones en función de su argumento, el personaje que
cuenta la historia y el mensaje que quiere transmitir a la audiencia.
¿Qué le aporta al Jonas Kaufmann liederista su experiencia en el
mundo operístico?
Creo que la experiencia operística podría
ser muy útil para algunas canciones que requieren una voz plena y el impacto
dramático de un cantante de ópera.
¿Y qué le aporta al Jonas
Kaufmann operista su experiencia en el mundo liederístico?
Cantar Lieder exige un trabajo mucho más preciso que cualquier otra
disciplina vocal, como más coloratura, más matices, dinámicas más sutilmente
diferenciadas y mayor sofisticación en el manejo de la música y de las
palabras; esta es una ventaja de la que puede beneficiarse un cantante en
sus interpretaciones operísticas. Por ejemplo, creo que todas estas
maravillosas frases suaves marcadas en piano en Lohengrin, pueden
transmitirse adecuadamente a la hora de interpretar un Lied y beneficiarse
si antes se ha interpretado el rol del caballero del cisne.
Como cantante que domina varios idiomas y cuya nacionalidad es el alemán, la
naturaleza de este idioma es la fuente principal en el género del Lied. ¿Qué
supone el idioma alemán para este género, frente a otros idiomas?
En comparación con el italiano, que es el idioma ideal para cantar, como
ya lo he afirmado en anteriores ocasiones (el lector puede acudir a las
diversas grabaciones del tenor en este idioma, especialmente Dolce Vita,
donde el italiano está expuesto con dominio, de hecho ha llegado a decir que
“Italia es mi segundo país” -nota del entrevistador-), el alemán puede sonar
mucho menos atractivo debido a todas estas consonantes que tiene. Pero si
aprendes a usar los obstáculos del idioma alemán de una manera musical,
digamos que usando las consonantes para una resonancia natural de la música,
al resonance, consigues tener ambas cosas: canto legato más elocuencia en la
dicción. Pero debo admitir que si escucho a los tenores italianos y
franceses cantar a Wagner, que está escrito en idioma alemán, a menudo
pienso: ¿por qué no escuchamos más a menudo este hermoso sonido en los
cantantes alemanes?
Parece que el mundo ha cambiado tras el
Covid-19… Qué opinión tiene…
Es evidente que el mundo ha
cambiado, no solo económicamente. Para muchas personas la crisis también ha
sido una oportunidad para reducir la velocidad de su día a día, para salir
de la rutina... Pero me temo que no es positivo para la cultura y,
especialmente, para la música clásica, ni siquiera en Alemania, donde las
bellas artes siempre han tenido un papel importante. Me temo que la variedad
y la amplia gama de ofertas que habíamos dado por sentado ya no existirá.
“Selige Stunde / Romantic Songs” fue grabado durante el
confinamiento del Covid-19. ¿Cómo ha llevado usted este periodo de encierro?
¿Y de quién fue la idea de hacer esta grabación?
Para mí,
este período seguramente no fue tan difícil como para la mayoría de las
personas, pero, de todos modos, si ya no puedes hacer tu trabajo y la
política no se preocupa mucho por tu situación, está claro que estás pasando
un mal momento. Pero traté de usar la pausa forzada para las cosas para las
que nunca había tenido el tiempo y dedicación suficiente. Así que llamé a
Helmut Deutsch y le dije: “Ahora es el momento de grabar Lieder”. Como no
pudimos hacerlo en un estudio, hicimos varias grabaciones de manera
individual.
¿Habría sido otro el resultado de estas íntimas
canciones si no hubiera pasado esto en el mundo?
Es una
pregunta interesante. Como no hemos estado en un estudio, ciertamente hay
una atmósfera diferente, más íntima, como había sido en los tiempos de
Schubert y Schumann cuando esas canciones no se presentaban en salas de
conciertos, sino en círculos privados.
Acaba de grabar Otello
con Antonio Pappano, papel que ha hecho suyo tras interpretarlo en escena en
numerosas ocasiones. Para que Otello no se ponga muy celoso de “Selige
Stunde”, háblenos también de esta grabación…
Después de las
actuaciones en Londres en 2017, el equipo de mi compañía discográfica Sony
Classical y yo decidimos grabar la ópera completa en el estudio con Tony
Pappano. Las sesiones de grabación tuvieron lugar en el verano de 2019, en
el Parco della Musica de Roma, con su maravillosa orquesta de la Accademia
di Santa Cecilia. Le debo muchísimo a Tony, no solo por compartir ideas
cuando estaba preparando mis partes, sino por los momentos de felicidad
tanto en el escenario como en el estudio, donde se las arregla en un solo
instante para generar la tensión de una actuación en directo. Tener dos
semanas de estudio para grabar una ópera completa es un lujo absoluto en la
industria musical actual. Y por mucho que valore la espontaneidad de una
actuación en directo, estoy agradecido de haber podido hacer Otello no solo
en directo, sino también en el estudio.
¿Proyectos para la
temporada 2020/21?
Gracias a Dios, algunas semanas después
del confinamiento llegaron ofertas muy interesantes, como los dos conciertos
al aire libre de la Aida en Nápoles y varios conciertos y recitales. Hasta
donde podemos planificar ahora, la próxima ópera es la versión francesa de
Don Carlos de Verdi en Viena entre septiembre y octubre.
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