Pro Ópera, Enero - Febrero 2015
Por Ingrid Haas
 
YOU MEAN THE WORLD TO ME
El segundo disco de Jonas Kaufmann para la marca SONY Classical es una selección de canciones alemanas que van desde aquellas que hizo famosas el gran tenor Richard Tauber en los años 20 y 30, hasta algunas otras que vienen de la conocida era del cine llamada “Tonfilm-Ära” (era de las películas con sonido), cuando surgieron tenores estrellas de cine tales como Joseph Schmidt.

La selección de Kaufmann sigue la línea interpretativa y estilística de las arias que canta Piotr Beczala en su disco Dein ist mein Ganzes Herz, solamente que en el caso del tenor alemán canta con una voz totalmente diferente a aquella que usa en la ópera. Su voz suena más aterciopelada, menos oscura y no abusa de su potencia de spinto. Para comercializar el disco a nivel mundial, Kaufmann grabó dos versiones del mismo álbum: una donde todas las canciones las canta en alemán (llamado Du bist die Welt für mich) y éste, que llegó a México y Estados Unidos, donde canta la mayoría de las canciones en inglés. No por ello no incluye algunas frases en alemán, tal como en la canción ‘You are my heart’s delight’. Kaufmann ha escuchado estas canciones desde su niñez y se aprecia que conoce el estilo y la intención de cada una de ellas. No intenta copiar la manera en la que Tauber o Schmidt las cantaban y, de vez en cuando, hace lucir su timbre oscuro sin exagerar. Su mezza voce es fina y siempre atinada en los momentos en que las canciones lo requieren; un ejemplo de esto es en la canción ‘My little nest of heavenly blue’. Una de las joyas musicales de este disco es la canción ‘Im Traum hast du mir alles erlaubt’ de Stölz, cantada por Kaufmann con más interpretación del texto que lucimiento vocal.

Al escuchar estas canciones, uno no puede negar la gran calidad musical de todas ellas y entendemos por qué fueron tan populares en su época. Aunque se conocen un par por ser piezas que generalmente se cantan en conciertos como encores, tales como ‘Dein ist mein ganzes Herz’ o ‘Freunde, das leben ist lebeswert!’ de Lehár, hay otras menos conocidas de igual calidad como ‘Grüss mir mein Wien’ de Kálmán o ‘Irgendwo auf der Welt’ de Heymann, que pertenece a una película llamada Ein blonder Traum (Un sueño rubio).

La soprano alemana Julia Kleiter canta con Kaufmann tres de las canciones a dúo: ‘Reich mir zum abschied noch einmal die Hände’ de la opereta de Paul Abraham Viktoria und ihr Husar, ‘Diwanpüppchen’ de Die Blume von Hawaii de Abraham (canción algo juguetona y muy cercana a los musicales del Hollywood de los 30) y ‘Glück, das mir verlieb’ de la ópera Die Tote Stadt de Korngold, única pieza que no pertenece al estilo de la canción popular, y que fue muy popular gracias a las versiones que grabaron la soprano Lotte Lehman y el tenor Richard Tauber con el concertador húngaro Georg Szell; recordemos que Korngold fue arreglista de varias operetas que fueron presentadas en Berlín y conocía perfectamente el estilo de esta música. Las voces de Kleiter y Kaufmann se funden bellamente en las tres piezas y ella posee un timbre cálido, con excelente fraseo y dicción clara.

Hay que recordar que en aquellos años, los cantantes de música llamada “popular” tenían entrenamiento clásico y piezas como ‘Lied vom Leben des Schrenk’ de Künneke fueron escritas para cantantes de ópera como el gran Helge Rosvenge. Es una canción sumamente difícil y hasta en la orquestación misma de la canción
se nota el carácter “operístico” que el compositor quiso imprimirle.

Kaufmann aborda esta canción de Künneke con su oscuro timbre y esa intensidad dramática tan característica de sus roles verdianos y wagnerianos.

Al escuchar este disco de Jonas Kaufmann, uno se transporta al Berlín de los años 20 y 30, la era de la República de Weimar, recordada por su música de gran calidad y que ilustra una época en la cual el mundo clásico y el popular podían fundirse en canciones como éstas. Jochen Rieder dirige la Rundfunk-Sinfonierorchester Berlin, acompañando a Kaufmann con gran estilo, versatilidad y sonando a veces como una banda de cabaret berlinés de los 30, como una orquesta de película de los estudios de la MGM o como una orquesta de opereta vienesa. Los arreglos son, en su mayoría, los originales, pero se hicieron también arreglos especiales para aquellas que no se encontraron completas, elaborados por Andreas N. Tarkmann.

Si usted no conoce estas canciones, este disco es perfecto para que se introduzca a piezas que forman parte de una época clave en la Alemania previa al nazismo. Un bonus es tener al tenor alemán Jonas Kaufmann cantando esta música tan cercana a él y con una voz que les da nueva vida para las siguientes generaciones.
 






 
 
  www.jkaufmann.info back top