|
|
|
|
|
Opéra Actual, SEPTIEMBRE 2015 |
Pablo MELÉNDEZ-HADDAD |
|
Kaufmann canta Puccini
|
|
Es
el tenor más importante del momento y su producción discográfica se ha
convertido en un preciado tesoro para el aficionado. En esta nueva entrega,
que se presenta este mes en todo el mundo, Kaufmann revisa la totalidad de
los papeles para tenor protagonista que Puccini concibiera, desde Edgar a
Calaf.
El cantante alemán está magnífico sobre todo en aquellos
papeles con mayor fuerza dramática. Es verdad que, como siempre, se
necesitan algunos segundos para acostumbrarse a su canto con mucho de
artificioso, pero una vez aceptada la convención, Kaufmann conquista en
todos los tracks, no solo por el maravilloso acompañamiento de Antonio
Pappano y por las fuerzas de la Accademia di Santa Cecilia, sino por ese
talento inconmensurable que el tenor exhibe ante cada personaje ofreciendo
interpretaciones cargadas de generosidad, sin ahorrar esfuerzos ni
sobreagudos. Su voz plena, su línea de canto cuidada al milímetro y su gran
musicalidad, tan apta para el melodismo pucciniano, convierten este trabajo
en un nuevo acierto. Porque Kaufmann también convence por su entrega
teatral, por el sentido que le brinda al texto: un gran ejemplo de ello es
su aterrorizado Roberto de Le villi, cargado de expresión.
Su
Cavaradossi es todo potencia y juventud, su Johnson (Fanciulla) todo poderío
(se anuncia para el otoño la salida de su Dvdde esta ópera grabada en la
Staatsoper de Viena), su Des Grieux enamora y su Calaf quita el sueño. En el
otro extremo están los papeles más ligeros; a pesar de su brillante entrega
y de las constantes matizaciones, su Rodolfo de La Bohème, por ejemplo, no
le va por color, por pesadez; algo similar sucede con su Pinkerton, aunque
borda el aria; y con el Ruggero de La rondine(en un esfuerzo evidente) y con
el Rinuccio de Gianni Schicchi, con el que realiza un trabajo de experto
aligerando aquí y allá.
Le acompañan varios secundarios en episódicas
escenas. Kristine Opolais, en cambio, participa en dúos de más envergadura
y da lo mejor de sí sobre todo como Manon Lescaut, pero también aporta
algunas frases como Mimì y Liù; su voz, en todo caso, no es atractiva ante
los micrófonos.
Un último apunte para saludar la magnífica calidad de
la grabación realizada en Roma en septiembre del pasado año. Un disco en una
edición de lujo (con Dvd del making of y extractos de las inminentes Manon
Lescaut y La Fanciulla del West) que entra por la puerta grande en la
Selección ÓPERA ACTUAL.
|
|
|
|
|
|
|
|
|
|
|
|
|
|
|
|
|
|
|